FICHA TÉCNICA
Título: Ant-Man
Título original: Ant-Man
Dirección: Edgar Wright, Peyton Reed
País: Estados Unidos
Año: 2015
Fecha de estreno: 24/07/2015
Duración: 117 min
Género: Acción, Ciencia ficción
Reparto: Paul Rudd, Michael Douglas, Evangeline Lilly, Corey Stoll, Judy Greer, Bobby Cannavale, Michael Peña, John Slattery, Wood Harris, David Dastmalchian
Distribuidora: Walt Disney Pictures
Productora: Walt Disney Pictures, Big Talk Productions, Marvel Studios, Marvel Entertainment, LLC
SINOPSIS
Scott Lang (Paul Rudd) es un hombre dotado de un asombroso poder: es capaz de menguar de tamaño y aumentar su fuerza hasta límites increíbles, emulando las características de las hormigas. Por eso, al transformarse en superhéroe, adopta el nombre de Ant-Man. Ahora, Scott debe salvar al mundo de una terrible amenaza con la única ayuda de sus poderes y de su mentor, el doctor Hank Pym (Michael Douglas).
CRÍTICA
Con los planes tan ambiciosos que tiene Marvel en el traspaso de su universo de los comics a películas tan solo se permitió un cierto tono transgresor en Guardianes de la galaxia, que supongo que sería el mismo que hubiera tenido esta Ant-Man si se hubiera encargado de él Edgard Wright (como está previsto en inicio) y no Peyton Reed, que ha sido al final quien se ha hecho cargo de dirigir la presentación de este superhéroe cuyas cualidades lo alejan un tanto de la grandilocuencia y el espectáculo de otros personajes del universo Marvel ya vistos en cine.
Puede que sea justo eso lo que hace destacar a esta película por encima de, por ejemplo, el otro título de Marvel visto en este año (Los Vengadores 2: la era de Ultrón) y es que el tono de comedia que tiene (quizás sin llegar al punto que tenía en origen este proyecto, pero aún así muy acertado) sirve de contrapunto a la solemnidad de otros films de superhéroes, que prefieren tirar hacia lo trascendental, cuando a lo mejor en lo común está el mayor entretenimiento. Es evidente que estamos tratando con un personaje más bien secundario en este universo, pero el resultado final consigue ser acertado.
En mi caso tengo que reconocer que mis expectativas hacia el presente título estaban un tanto motivadas por lo mucho que me gustó El increible hombre menguante de Richard Matheson (tanto la novela como la adaptación que se llevó a cabo al año siguiente de su primera edición) por lo que tenía curiosidad por ver como reflejaban los actuales efectos digitales algo tan sorprendente como el mundo que nos rodea visto desde la perspectiva de un insecto. Mientras que en la obra literaria el efecto menguante era progresivo, este Ant-Man tiene control sobre el mismo, aparte de (evidente en su nombre) sobre las propias hormigas.
El resultado visual es tan portentoso como imaginaba, mostrándonos escenarios tan variados como la moqueta del cuarto de la hija del protagonista, la hierba del jardín o el interior de unas tuberias o un maletín como inmensos espacios donde este superhéroe vivirá sus andanzas. Asimismo el Scott Lang al que da vida Paul Rudd es un perdedor entrañable que se meterá en esta aventura para recuperar el aprecio de su hija pequeña, lo que ayuda a hacerlo más accesible al público, a lo que se suma que sus poderes (empequeñecer a voluntad y control sobre las hormigas) lo alejen de la espectacularidad de otros superhéroes.
Hay que reconocer que el personaje no pierde su esencia básica en esta traslación a la gran pantalla, y es que aunque sea Scott Lang el Hombre Hormiga de este film, trabaja bajo el soporte de Hank Pym, el científico que descubrió los secretos de la miniaturización, y al que da vida un acertado Michael Douglas (lo que concuerda con los comics, en donde Pym fue el primero y Lang el segundo Ant-Man) También resulta acertada la comparación previa que hacian algunos con que este film era del estilo de Ocean’s Eleven en el universo Marvel, como resulta evidente en todo el plan orquestado para acabar con el villano Chaqueta Amarilla.
Su inserción dentro del conjunto de films donde está ubicada también resulta acertada, con las justas menciones hacia Los Vengadores (ver el choque de Ant-Man con el Halcón visto en la secuela del Capitán América) sembrando las bases para una nueva aventura de este superhéroe (ver su paso por el mundo subatómico, detalle relacionado con el destino que tuvo la Avispa (Janet Van Dyne), personaje citado tanto en esta película como en la primera de las dos escenas post-créditos del presente film, en ese caso con un evidente vistazo a su uniforme)
Lo mismo que los superhéroes tienen en las viñetas unos recurrentes retornos hacia sus orígenes (para que no pierdan su esencia básica) esta Ant-Man parece un ejercicio de los estudios Marvel por recuperar la esencia de sus inicios, algo que se hace evidente en una estructura que puede recordar al primer Iron Man, con ese tono más simple en el relato, lejos de la progresiva ambición de posteriores films. También es justo destacar esa ambivalencia entre lo épico y lo cómico, que alcanza sus mejores resultados en el climax final en el tren eléctrico, según los puntos de vista que tome el relato.
LO MEJOR: Su falta de pretensiones y su sencillez (que consigue transformar en sus mayores virtudes), así como unos muy curiosos efectos visuales (que recrean muy bien la experiencia de la miniaturización) y unas acertadas dosis de comedia.
LO PEOR: Intuir en algunos momentos el tono que hubiera tenido de haberla llevado a cabo Edgar Wright, quizás un tanto más gamberro.