Título: Cisne negro
Título original: Black Swan
Dirección: Darren Aronofsky
País: Estados Unidos
Año: 2010
Fecha de estreno: 18/02/2011
Duración: 107 min.
Género: Drama, Thriller
Reparto: Mila Kunis, Natalie Portman, Christopher Gartin, Winona Ryder, Sebastian Stan, Vincent Cassel, Barbara Hershey, Janet Montgomery, Toby Hemingway, Kristina Anapau
Guión: Mark Heyman, Andres Heinz
Productora: Phoenix Pictures, Protozoa Pictures, Cross Creek Pictures
SINOPSIS
Nina (Natalie Portman) es una bailarina de Nueva York obsesionada con su profesión. Vive junto a su madre, Erica (Barbara Hershey), una ex bailarina que la somete a una rígida disciplina y que controla cada uno de sus movimientos, como si fuera su sombra. Las obsesiones de ambas llegan al límite cuando el director artístico de la compañía (Vincent Cassel) decide sustituir a su principal estrella, Beth (Winona Ryder), para representar ‘El lago de los cisnes’. En principio Nina es la mejor colocada para hacerse con el papel, pero de repente surge una competidora letal, Lilly (Mila Kunis). Las dos jóvenes lucharán a muerte por llevarse la gloria.
CRÍTICA
Hay directores que tienen una particular forma de personalizar sus películas, con lo cual resultó sorprendente cuando se hizo público que el aqui referenciado Darren Aronofsky se iba a hacer cargo de The Wolverine, la secuela de Lobezno, cuando su nombre ha ido siempre más asociado a films más “artísticos” y no tan (a priori) comerciales: sirva como muestra su labor en The wrestler o en este Cisne Negro. Es justamente ese toque personal el que puede provocar que los que no congenien con él menosprecien el resultado obtenido, pero respetando las diferentes valoraciones, los que si entren en el juego que propone la película gozarán sin duda de uno de los mejores títulos estrenados en los últimos meses.
Parte del éxito artístico de la película hay que dárselo sin duda a Natalie Portman, quien aqui hace la actuación de su vida, por la que no me extrañaría que fuera premiada con un Oscar. Eso tan sólo serviria para confirmar algo que los veteranos ya sabiamos desde que la descubrimos en 1994 en León, el profesional y es que es la mejor actriz de su generación, digna heredera de los grandes nombres femeninos que nos dió Hollywood en el pasado. Aqui nos muestra una extraordinaria transformación del bien al mal, que puede recordar a la típica dicotomia tipo Jekyll y Hyde pero aqui centrada en la psicología de su personaje, primero mostrado como el Cisne Blanco (todo candor, inocencia y pureza) para luego transformarse en el Cisne Negro (lujurioso, maquiavélico y retorcido) Será en esa progresiva transformación cuando veremos algunas de las escenas más eróticas (y pese a todo justificadas) vistas en la carrera de la puritana Natalie Portman, destacando la de sexo lésbico que compartirá con la sensual Mila Kunis.
Resulta curioso decir semejantes alabanzas ante un film cuyo argumento resulta tan simple (en lo básico es sólo las expectativas de una bailarina de ballet por protagonizar El lago de los cisnes), pero es que Aronofsky consigue poco a poco meternos en la mente de su protagonista y mandarnos junto a ella en una transformación sensorial y mental cuya parte final es MAGISTRAL, a la altura de clásicos como El Resplandor (por la progresiva duda entre lo que es real y lo que no, al menos desde el punto de vista del personaje de Natalie Portman). Pero no sería la única comparación con un clásico del terror, ya que la agobiante sensación de control que experimenta la madre de la protagonista sobre la misma puede recordar a otro clásico, también basado en una obra de Stephen King: hablo sin duda de Carrie. El contexto del ballet en el que se mueve la acción del film no aburre (como pueden pensar más de uno) sino que encima sirve para complementar esta progresiva obsesión enfermiza, ya sin retorno en el tramo final (¿he dicho ya que Natalie Portman se merece todos los premios habidos y por haber por su actuación? Llamarme reiterativo pero es que la actriz está MAGNÍFICA soportando sobre sus hombros el peso de la historia)
Otro acierto del film sería su duración: el tema no es del agrado de muchos (que lo considerarán tedioso) pero los números de ballet no entorpecen sino que están muy bien integrados en una historia que no se alarga innecesariamente (sus poco más de 100 minutos es todo cuanto necesitaba el argumento) Como es natural se pueden hacer comparaciones con otros muchos títulos aparte de los que he citado en líneas superiores, pero en un año como el pasado 2010 donde tuvimos tan pocos títulos que de verdad fueran dignos de mención, se agradece que Aronofsky nos regale este perturbador ejercicio psicológico beneficiado de esa magnífica intérprete llamada Natalie Portman: dejense llevar por esta pequeña gran actriz y disfruten del que sin duda es uno de los mejores títulos del año.
LO MEJOR: Natalie Portman, quien lleva sobre sus hombros de manera magistral todo el peso de esta gran película.
LO PEOR: Tener una equivocada visión previa del film debido a su temática.
