El joven Sherlock Holmes: el ojo del cuervo (El jove Sherlock Holmes: L’ull del corb)
Autor: Shane Peacock
Editorial: Almadraba/Castellnou
336 páginas
SINOPSIS
Londres 1867. Una mujer es brutalmente asesinada en un callejón. No muy lejos de allí, un joven de trece años sueña con una vida mejor. Se llama Sherlock Holmes. Atraído por el crimen, decide saber más… y acaba convertido en sospechoso. Esta emocionante novela de misterio nos desvela las claves en torno a la compleja y fascinante figura del que llegará a ser el detective más famosos de todos los tiempos.
RESEÑA
A nadie le extraña hoy en día el concepto de precuela, es decir, de narrar sucesos anteriores a la acción de tal o cual título de renombre (ejemplos hay a montones: uno de los más conocidos por evidente sería la segunda trilogia de Star Wars, la más reciente, que cronológicamente sería anterior a la que lo empezó todo). Y ya no digamos en el mundo de los comics de superhéroes, donde se cuentan tantas veces los orígenes y siempre desde un punto de vista distinto… En el caso de un personaje tan mítico como Sherlock Holmes no puedo añadir nada que no se sepa, y si hablamos de sus orígenes le viene a uno a la cabeza la excepcional El secreto de la pirámide, película de 1985 que narraba el primer encuentro del famoso detective y su eterno compañero Watson siendo ambos unos adolescentes. Por eso que con el grato recuerdo que guardo de dicho film, más la de por si afición que siempre he tenido hacía el famoso detective, eché mano corriendo a este libro en cuanto lo ví por la biblioteca.
Aunque estuviera catalogado (y de hecho es el público potencial al que va dirigido) como novela juvenil, creo que desde el fenómeno Harry Potter ha quedado claro que es una línea muy fina la que separa las lecturas de los adolescentes de la de los adultos, con lo cual era absurdo discriminar una obra como esta (pensando que es un acercamiento simplificado del personaje al estar dirigida en origen al público más joven), y tengo que reconocer que me alegro de ello, porque para sorpresa mia me he encontrado una historia respetuosa, entretenida, ágil y de facil lectura. El joven Sherlock Holmes que conocemos en este libro (el primero de varios más, según he leido) puede recordar mucho tanto en situaciones como en personajes a los clásicos de Charles Dickens, si bien el autor no se priva de claros homenajes como son el personaje de Irene Doyle, que debe su nombre al único amor del personaje (Irene Adler en Un escándalo en Bohemia) y al creador del mítico detective (Arthur Conan Doyle). Asimismo el ritmo de la historia es constante, en el viaje iniciático que vive aqui el personaje, en su búsqueda del verdadero culpable de un misterioso asesinato en el que, por circunstancias diversas, se ve involucrado él mismo (lo cual dará pie incluso a la trágica muerte de un personaje que justifica su posterior caracter).
De todas maneras si es cierto que la juventud del personaje está tomada con rasgos generales, pero que obvian la cronología establecida por William S.Baring-Gould como la más fidedigna biografia de Sherlock Holmes. Asimismo la presencia de nombres que en el futuro serán clásicos del mundo holmesiano (como Lestrade) se notan quizás un poco metidos con calzador (aunque coherentes pese a que al principio se cite como viejo al luego famoso inspector de Scotland Yard, cosa que temporalmente no cuadraría). La presencia de los Irregulares de Baker Street está muy bien lograda, sugiriendo en ocasiones (o al menos eso creo yo) la afición del lider de los mismos (Malefactor) por las matemáticas (la rama en la que está especializado el Profesor Moriarty, némesis del famoso detective… ¿alguna conexión entre ambos?)
LO MEJOR: Es un libro recomendado PARA TODOS LOS PÚBLICOS (así, en mayúsculas, porque es cierto).
LO PEOR: Pequeños detalles pueden chirriar un poco sobre la imagen que tenemos del personaje (¿origen judio?).