Justo acabo de ver el 6º y último capítulo de la 10ª temporada de Expediente X, el cual acaba con un intrigante cliffhanger de cara a una temporada 11 que supongo que habrá si las audiencias les han acompañado. Y no lo negaré, me ha resultado un regreso muy entretenido… pero también me ha dado la sensación de que no hay nada nuevo que contar.
Pero primero pongámonos en antecedentes: esta mítica serie de Chris Carter la ví por primera vez en Telecinco en los años noventa, y me pasó con ella como con la actual The big bang theory: al no seguirlas desde su inicio recuperé los episodios perdidos en las reposiciones que hacia el canal (fue con esta serie que comenzó la moda de emitir las series americanas de dos en dos episodios, siendo por tónica habitual el segundo la reposición… aunque ahora si se les tercia te pueden meter hasta cinco o seis, sean nuevos o no)
Recuerdo perfectamente que fue con la primera película que tuvo la serie en 1998, la primera vez que asistí a una sala de cine y me tuve que poner casi delante de la pantalla de todo el público que había congregado (era su momento de mayor éxito) Dicho film hacia de puente entre la quinta y la sexta temporada, y a partir de ahi fue cuando Telecinco empezó a emitirla en horarios cada vez más nocturnos hasta que al final dejó inéditas (aunque luego otros canales si las emitieron) las últimas dos temporadas, las cuales yo ya no vi porque había perdido el interes por una serie cuya mayor fama fue el milenarismo que hubo a finales del siglo XX, aparte de que aún no existian las muchas ventajas que da ahora internet y sumado a la ausencia de Duchovny, que ya entonces aspiraba a no quedarse encasillado en el personaje (aunque al final fue que si)
Aún así nadie niega el grato recuerdo que me quedaba, por lo que decidí darle una oportunidad a esta 10ª temporada (14 años después del final de la serie en televisión y 8 años desde su decepcionante segunda película estrenada en cines), en esta actual moda revival donde se les da cancha a conceptos exitosos de los ochenta y noventa, para exprimir aún más su éxito, ahora sobretodo nostálgico. Pero al quedar ya tan lejana la serie, y sin haber visto yo las últimas dos temporadas, hice las consultas pertinentes por internet (¡bendita wikipedia!) para saber más sobre ese hijo del duo principal, mi mayor intriga al principio de esta mini-temporada de 6 episodios.
¿Impresión final? Pues aunque el regreso no me ha disgustado, me deja la sensación de que su tiempo ya pasó: la serie fue una clara influencia en su estilo para otras que han venido después por lo que reinsistir sobre lo mismo solo puede llevar al agotamiento de una fórmula ya sin esquemas que romper (eso se hace evidente en la inclusión, un tanto forzada, de los agentes Miller y Einstein, una especie de variante más joven de Mulder y Scully para ¿sustituirlos si la serie continua?)
Supongo que habrá temporada 11 teniendo en cuenta el intrigante final de esta, y como queda claro que el hijo de Mulder y Scully tendrá importancia capital en la misma (o eso supongo), ahi tendremos el fichaje de algún joven actor que pueda continuar la franquicia y seguir en ese bucle de conspiraciones sobre conspiraciones (que creo que es lo que ha funcionado mejor en esta décima temporada -ver episodios 10×1 y 10×6-, ya que en los autoconclusivos ha primado cierta apatia, al menos en inicio, por parte de Gillian Anderson (ya evidente en la cancelada Hannibal) y cierto tono en exceso bufonesco por parte de David Duchovny, unido a unas tramas que por momentos rozaban demasiado lo paródico)
La Gillian Anderson está mucho más follable ahora que cuando empezó la serie, sip.
Suscribo lo de Gillian Anderson. En Hannibal está absolutamente increíble. El cabronazo de Duchovny se autoparodia a sí mismo en Californication, menudo fucker que está hecho.
Me ha gustado la reanudación de la serie, incluso lo de poner a la niña de “A dos metros bajo tierra” tiene su punto. A ver como sigue si es que renuevan.
UN PUTO TRUÑO COMO LA COPA DE UN PINO… Lo siento mucho ya que me encantaba la serie. Mejor no hacer nada y dejar el buen gusto de boca de cuando éramos más youngs…