Gorrión Rojo

Tengo que admitir que la más directa comparación que se me pasó por la mente mientras veía esta película (e incluso cuando la acabé) fue la de Atómica, con la que compartiría la trama de espionaje y la belleza (y solvencia) de la actriz protagonista, si bien en este caso con menos acción aunque no por ello menos emoción (la primera vez que miré el reloj fue casi a las dos horas) Si aquel film estaba más o menos basado en una novela gráfica, esta Gorrión Rojo lo está de la obra literaria del mismo título firmada por Jason Matthews, un exoficial de la CIA, que no he leído en el momento de realizar esta crítica, por lo que la misma se centra tan solo en una valoración de este film, sin entrar en lo más o menos fiel que sea a la novela original.

Esta película marca la cuarta colaboración entre su actriz protagonista (Jennifer Lawrence) y su director (Francis Lawrence, mismo apellido aunque me parece que sin ningún parentesco) tras tres (de las cuatro) entregas de la saga de Los juegos del hambre. En este caso se nota que han llevado a cabo un proyecto más ambicioso (al menos en cuanto a pretensiones esa es la idea que da), si bien el resultado no acaba de convencer debido a ese problema tan común en el cine de hoy en día, que consiste en dilatar (en este caso sin necesidad) algo que se podía haber narrado igual pero en menos tiempo. No la culparé de no ser un título entretenido, porque SIN DUDA LO ES ya que durante sus casi dos horas iniciales lograron todo mi interés, pero llegados a cierto punto la historia debería haber concluido, no lo hace y ya no entretiene tanto.

Gorrión Rojo es un thriller de espias donde la protagonista absoluta es Jennifer Lawrence, que tiene a su cargo el papel de Dominika Egorova, una bailarina del ballet Bolshoi (a la que conocemos en unas escenas que me llevaron a recordar la película Cisne Negro, sobretodo por como retrata las rivalidades internas), que debido a un “accidente” pronto se ve en la tesitura de tener que aceptar la oferta que le propone su tío si desea seguir teniendo apoyo financiero. El resultado de la misma la obligará a asistir a una escuela de “gorriones”, nombre en clave con el que se definen a aquellos espias, mujeres sobretodo, que logran manejar el arte de la seducción con total maestría de cara a conseguir del enemigo todo aquello que se propongan (será en ese lugar donde la película nos ofrece con asombrosa franqueza algunos contenidos sexuales que uno no esperaría ver en un título de estas características, tales como violación bastante explícita o desnudez frontal completa, que en el caso de la protagonista resulta sorprendente e inesperada)

Dicho periodo de “aprendizaje” sirve para mostrarnos la deshumanización evidente de cara a obtener agentes sumisos que aún se practica en la actual Rusia, aunque uno piense que desde que se acabó la Guerra Fría las cosas tendrian que haber cambiado (de todas maneras al ir sin referencia previas en inicio no pensaba que la historia fuera actual, si bien detalles posteriores lo confirman) Es todo ese tramo el que también me llevó a pensar en la Viuda Negra, personaje de los comics Marvel del que ahora se supone que habrá una película, cuyos orígenes serían en esencia similares a los de la protagonista de esta historia, si bien resulta evidente pensar que en ese hipotético futuro film, si se decantan por esta vía, rebajarán la muy evidente atmósfera sexual que tiene Gorrión Rojo, así como ciertos detalles de tortura gráfica. Pero centrándonos en el presente título hay que admitir que resulta una película de espias entretenida, con un personaje principal que sabe jugar a dos bandas debido a las circunstancias, pero que hubiera mejorado si se hubiera condensado su excesivo metraje.

============================
  • FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
  • FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 2 de marzo de 2018
  • LO MEJOR: El film resulta un excelente vehículo para que se luzca Jennifer Lawrence, por lo que gustará en función de lo que a cada uno le parezca la citada actriz, a la que secundan (y nunca mejor dicho, porque poca opción tienen) actores de renombre como Charlotte Rampling o Jeremy Irons.
  • LO PEOR: Algo ya habitual en el cine de hoy en día, y es que para lo que cuenta (y como te lo cuenta) le sobra metraje, si bien es justo admitir lo entretenida que resulta durante sus casi dos horas iniciales.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *