Dos amigos se encuentran en una ultramoderna oficina en el año 2176.
Hola, Juan, ¿cómo te va?
De maravillas Carlos, muchas gracias.
A propósito, te felicito, ¡qué hermosa secretaria tienes!
– Pues ahí como la ves, es un robot.
– Ah, ¿Un robot? a ver, explícame.
– Mira, le aprietas una teta y toma dictado, le aprietas la otra y escribe en el ordenador, word, access, excel ó power point ó lo que le digas, le lengüeteas la oreja derecha y te sirve café y eso no es todo hace el amor, mejor que calquier mujer de carne y hueso.
– ¡No me digas!
– Si, es una maravilla… es más . . . si quieres te la presto un rato para que te ayude.
El hombre acepta y se la lleva supuestamente a su oficina. A los pocos segundos, desde el baño, se escuchan unos gritos desesperados
-¡Aaayyy!, ¡Aaaayyy!, ¡Aaauuuuuxiiiliooo!, ¡ayudenmeeeee por favooooor!
El amigo dueño del robot corre al baño gritándole al otro.
– ¡Carlos! ¡Carlos! ¡Se me olvidó decirte que por el culo es un sacapuntas…..!!