FICHA TÉCNICA
Título: Los mercenarios 2
Título original: The Expendables 2
Dirección: Simon West
País: Estados Unidos
Año: 2012
Fecha de estreno: 24/08/2012
Duración: 102 min.
Género: Aventuras, Acción
Reparto: Liam Hemsworth, Jason Statham, Bruce Willis, Arnold Schwarzenegger, Sylvester Stallone, Jean-Claude Van Damme, Jet Li, Scott Adkins, Chuck Norris, Dolph Lundgren
Guión: Sylvester Stallone, Richard Wenk, Ken Kaufman, David Agosto
Distribuidora: Aurum Producciones
Productora: Millennium Films, Nu Image Films
SINOPSIS
En “Los mercenarios 2″, Barney Ross (Sylvester Stallone) y su equipo se vuelven a unir cuando el señor Church (Bruce Willis) los recluta para encargarse de un trabajo aparentemente sencillo. Sin embargo, pese a parecer dinero fácil, las cosas se tuercen y uno de sus miembros es brutalmente asesinado, lo que impulsa al resto de sus compañeros a buscar venganza. El equipo, empeñado en desquitarse, va dejando un rastro de destrucción a su paso entre las fuerzas enemigas, sembrando el caos, para acabar encontrando una amenaza inesperada: cinco toneladas de plutonio apto para uso militar, una cantidad más que suficiente para cambiar el equilibrio de poder en el mundo. Aunque eso no es nada comparado con la justicia que van a imponer al vil adversario que asesinó despiadadamente a su camarada. Y todo ello hecho al inimitable estilo de los mercenarios…
CRÍTICA
Repasando lo que dije hace un par de años de la primera entrega (lo teneis por este enlace) lo podría hacer extensible a esta secuela de una saga que, si el éxito acompaña, ya piensan en darle una tercera entrega para la que se barajan nombres como los de Clint Eastwood, Harrison Ford, Wesley Snipes o Nicolas Cage. Y es que Los mercenarios 2 no engaña a nadie y da lo que propone, por lo que está claro que no es un film recomendable para aquellos a los que no les gustó la anterior entrega o los que consideren a todos estos actores del cine de acción viejos carcamales a los que uno ya no se cree en papeles así.
¿Que ha cambiado entonces? Pues el estilo más “serio” de Stallone como director (y lo pongo entre comillas, por aquello de que aunque digamos serio tampoco queremos decir Shakespeare) da paso al más autoparódico de Simon West, que realiza aqui un labor parecida a la vista en Con-Air, donde también había todo tipo de bromas (de mayor o menor gracia) dentro de un combinado de acción de la “vieja escuela” (entendiéndose como tal la acción física, sin las piruetas informáticas que vemos en algunos títulos actuales)
Eso mismo es lo que encontramos aqui pero elevado a la enésima potencia: atención a los divertidos comentarios entre los personajes de Willis y Schwarzenegger donde se hacen guiños a sus respectivos héroes de acción más famosos (John McClane de Jungla de Cristal el primero y Terminator el segundo) pero sobretodo atención a la entrada de Chuck Norris en escena, que al pase de prensa donde fuí se celebró con un sonoro aplauso entre toda la platea (yo incluido) Para él va el guiño sobre McQuade Lobo Solitario, aunque el descojone viene cuando cuenta su enfrentamiento con una cobra (dando pie a la consabida guasa de que él puede con todo)
El mayor goce para los que crecimos con las películas de estos actores es verlos a todos juntos, y ahi he de decir que se amplia la presencia de Willis y Schwarzenegger en esta entrega (recordemos que en la anterior lo suyo fue tan solo un cameo), lo cual repercute en menos presencia de otros como Jet Li (tan solo testimonial al inicio de la película, aunque también recibe su consabido chiste) o Liam Hemsworth (el hermano de Chris Hemsworth, el Thor cinematográfico), que también no deja de ser el eslabón más debil del grupo junto con el personaje de Nan Yu (única dosis de estrógenos en un grupo tan testosterónico)
De todas maneras la inclusión de nuevos como Norris es tan solo circunstancial (apenas tres o cuatro escenas, y sin su famosa patada voladora, aunque me imagino que con 72 años a sus espaldas el tio no está para muchos trotes) quedando el protagonismo principal de nuevo repartido entre los personajes de Stallone y Statham, con ciertos guiños al de Lundgren (por su coeficiente intelectual: atención a la teoria de la relatividad)
¿Y el villano de la función? Pues esquemático, lo que uno puede preveer de un film así, pero pese a todo caracterizado de manera muy correcta por un Jean-Claude Van Damme cuyo duelo final con el personaje de Stallone creo que SI consigue ser tan emblemático como el de muchos de los combates que ambos actores han disputado (por separado) en sus respectivas carreras comerciales. Y atención porque pese a sus 52 años el tipo aún sabe repartir estopa (incluidas un par de patadas voladoras); por eso que insisto en recomendar este film tan solo a aquellos que disfrutaron en su infancia y/o adolescencia con las películas de todos estos héroes de acción, que demuestran lo bien surtidos que estábamos hace tres décadas (y lo mal que estamos ahora)
Al final Los mercenarios 2 resulta un divertido espectáculo violento de testosterona pura y dura (creo que vendría a ser el total contrapunto a Sexo en Nueva York, donde los estrógenos rezuman de cada fotograma) al que no hay que buscarle muchos vericuetos en su historia (por más de que en cierto momento uno piense que puede haber hasta explosión nuclear) y que mejora respecto a su antecesora al lograr lo que toda secuela promete (más y mejor) añadido aqui a una autoparodia realmente descojonante. En resumidas cuentas, es TODO lo entretenida que uno ya se espera.
LO MEJOR: Que en el reparto estén todos los que estan es sin duda lo mejor de la película, además de su sentido del humor dirigido a los fans de estos héroes de acción.
LO PEOR: Molan los que están, pero lástima de los que no (Mickey Rourke no repite, aparte de los muchos nombres que uno incluiría en un film así: Rutger Hauer, Kiefer Sutherland, Steven Seagal, Nicolas Cage, etc)
EL DETALLE: Para los que tenían dudas acerca de la violencia del film, tan solo citar que no se cortan un pelo, como se demuestra en la parte inicial donde la sangre corre a sus anchas (atención al chiste, que no sé como será en su versión doblada: Rest in pieces (“descanse en pedazos”) en lugar de Rest in peace (“descanse en paz”)