El próximo 11 de junio llega a los cines españoles El Retrato de Dorian Gray, una película basada en la obra inmortal de Oscar Wilde.
Wilde siempre afirmó que había en él un poco de los personajes de El Retrato de Dorian Gray.
Fue sin duda un carismático personaje de la Inglaterra victoriana y ciertamente muy bien podría haber sido un personaje de su propia obra maestra. Como Dorian, Ben Barnes en la película, fue un apasionado del placer y la belleza, algo que no pocos problemas le trajo a lo largo de su existencia.
Su vida estuvo rodeada por el escándalo. Fue muy popular en los ambientes más selectos de la capital del imperio y gustaba de disfrutar de los locales más exclusivos y los placeres más exquisitos. De hecho una de las citas más conocidas del autor afirma que “la mejor manera de librarse de la tentación es caer en ella”.
Como Henry Wotton, el hedonista y amoral “consejero” de Dorian interpretado por Colin Firth, también frecuentaba sórdidos burdeles y decadentes fumaderos de opio en Londres.
También son bien conocidos sus escarceos homosexuales, algo realmente impensable en aquella época. Su íntima amistad con Lord Alfred Douglas fue la comidilla de las clases altas londinenses a finales del siglo diecinueve. Todos estos rumores truncaron de raíz su brillante carrera e incluso le llevaron a enfrentarse a un juicio que supuso dos años de trabajos forzados para el genial escritor, la ruina económica y la ruptura de su matrimonio. Paradójicamente, en sus horas más oscuras en la fría prisión de Reading, Wilde escribió el que quizás sería su poema más bello, La balada de la cárcel de Reading.
Oscar Wilde nunca se recuperó de su penosa estancia en prisión. En 1897, tras salir del penal, se traslada a París, donde muere poco después. Fue enterrado en el cementerio de Père Lachaise, donde a día de hoy se pueden encontrar firmas, dedicatorias, agradecimientos e incluso poemas de todos aquellos que aún aprecian su ironía, su ingenio y, sobre todo, su maravilloso e inmortal legado literario.
CITAS CÉLEBRES DE OSCAR WILDE
- Lo menos frecuente en este mundo es vivir. La mayoría de la gente existe, eso es todo.
- Sólo hay una cosa en el mundo peor que estar en boca de los demás, y es no estar en boca de nadie.
- Haría cualquier cosa por recuperar la juventud… excepto hacer ejercicio, madrugar, o ser un miembro útil de la comunidad.
- La única ventaja de jugar con fuego es que aprende uno a no quemarse.
- Las preguntas no son nunca indiscretas. Las respuestas, a veces sí.
- Cínico: un hombre que sabe el precio de todo y el valor de nada.
- Perdona siempre a tu enemigo. No hay nada que le enfurezca más.