Los asesinos en la gran pantalla creo que es uno de los subgéneros (dentro del terror) más abordados de las últimas décadas, siendo la mayoría de veces ese aluvión de secuelas que generan lo que al final aburre al personal. En el caso de la inicial (y emblemática) La noche de Halloween de John Carpenter la franquicia ha dado de si como para que entre secuelas y reboots la presente entrega de la saga sea ya la número 11. En mi caso soy de los que ha visto la original del 78 y (por el regreso de la sufridora Jamie Lee Curtis) la de Halloween H20 (por el vigésimo aniversario) más el remake y su secuela del Halloween de Rob Zombie. No se me pasa por la cabeza verme ninguna más (el pasado, pasado está), máxime con lo bastante caótica que es la continuidad en esta muy extensa saga (por este enlace se intenta poner un poco en orden)
Matar o morir (Peppermint)
Todo el público tiene sus placeres culpables en el mundo del cine; se trata de películas que distan mucho de poder calificarlas como buenas, pero que el espectador no puede negar esos buenos momentos que le hicieron pasar. En mi caso he citado en ocasiones que fue el Spider-Man de Sam Raimi el que me aficionó al arácnido de Marvel, aunque aqui si hay coincidencia de que estamos hablando de una película bien valorada. Pero en el otro extremo está el Daredevil de 2003 con Ben Affleck de protagonista al que siguió la Elektra de 2005 con Jennifer Garner, dos títulos que son sin duda alguna bastante mejorables pero gracias a los cuales me aficioné a ambos personajes. Si bien respecto al caso del primero la serie de NetFlix mejoró notablemente la fallida película inicial, en lo que respecta a Elektra me sigo quedando con la Jennifer Garner que le dió vida allí, que sigo considerando bastante más atractiva para ese personaje que la Elodie Yung que le ha dado vida en el Daredevil de NetFlix.