En algunas ocasiones uno va al cine con unas específicas expectativas para que luego el resultado final no sea lo esperado, pero tras asumir los parámetros que te ofrece la historia, su secuela mejore bastante al original porque uno ya asume por donde “cogerla”. Esa condición puede pasar (y de hecho lo reconozco) con todo tipo de cintas, cuyas secuelas pueden mejorar al original porque uno ya asume lo que va a ver (habrá quien se decante porque una buena secuela también puede servir para mirar el film original con otra perspectiva) De todas maneras hay otros detalles bastante importantes, como por ejemplo el doblaje, y eso es lo que puede repercutir en que en su día ¡Rompe Ralph! la catalogué como un mero entretenimiento por momentos demasiado infantil, en la que el personaje de Vanellope se me hizo especialmente irritante, y es que la ví doblada, mientras que esta secuela la he podido disfrutar en un pase previo en versión original subtitulada.
También es asumible que la evidente mejora de esta película respecto al título previo es no concentrarse tanto en ese almibarado mundo de Sugar Rush al que pertenece Vanellope, y abrirse (casi) del todo a los infinitos mundos que ofrece internet, por lo que si eres un internauta en mayor o menor grado, disfrutarás con el aluvión de referencias que pueblan esta película. De hecho hay tantísimas y en tal cantidad como para que esta secuela sea un evidente ejemplo de ese tipo de películas que requieren más de un visionado para atrapar el aluvión de guiños y cameos que tiene, bastante acertados y simpáticos en general.
La premisa argumental es bastante sencilla: por cierta acción de Ralph, el juego al cual pertenece Vanellope queda roto, faltando una pieza primordial que debido a la antigüedad del mismo la hace imposible de encontrar. Con el peligro de que si no se consigue en un tiempo determinado el juego será desguazado y vendido por piezas, pronto se abre la oportunidad de encontrarla en internet, pero nada es gratis y el intentar conseguir el dinero necesario para ello les llevará a vivir todo tipo de experiencias, cuyo punto álgido sería cuando en su tramo final se justifica el propio título de esta película. En este caso esta secuela toma nota de lo prometido (y obtenido tan solo de una forma parcial) en el film precedente, los guiños a personajes de populares videojuegos (que en muchos casos se quedaban en meros cameos) para ofrecernos aqui una visión de internet tan amplia que te deja sin duda con ganas de más. Entre los más acertados (y hay una gran cantidad) está ese momento de autobombo donde Disney se mira a si misma con temas bastante recurrentes a la marca (como sus princesas) o simpáticos guiños hacia las franquicias de Star Wars y los superhéroes de Marvel.
De todas maneras, y aunque estamos ante un producto Disney con todo lo que ello lleva implícito, queda también patente la parte más “oscura” de internet, primero con esa simpática parodia de todo ese spam que puebla la red de redes, pero a partir de ahi mostrando también la funesta acción tanto de trolls (muy evidentes cuando descubren los comentarios de los usuarios) como de virus (en otro acto de Ralph, siempre con la mejor intención pero que se le escapa de las manos), que se desmadran en un segmento final donde tenemos (lo cual no es una crítica negativa, tan solo un detalle más) el enésimo homenaje al clásico King Kong. También son muy divertidos, por lo mucho que uno se puede ver reflejado en ellos, cuales son las actitudes de los usuarios de internet cuando la misma les da problemas, bien sea desde el corte de la línea hasta la aplicación que no acaba de cargarse del todo o ese juego que se corta en lo más “intenso”, pero el mayor mérito estaría en saber representar de una forma entendible muchas de las interacciones que se hacen al conectarse a la citada internet. En este caso, eso si, al final convencerá más a los internautas en general que a los jugadores en particular, con apenas pocos detalles hacia estos últimos.
- FICHA TÉCNICA y SINOPSIS en IMDB (en inglés) y FilmAffinity (en español)
- FECHA DE ESTRENO EN ESPAÑA: 5 de diciembre de 2018
- ESCENAS TRAS LOS CRÉDITOS: Hay dos, una de ellas que ya se ha podido ver en algún trailer previo (y que no citaré para evitar el spoiler) y otra donde con la excusa de un primer vistazo a otra secuela muy esperada de Disney, lo que nos ofrece es el recuerdo de una clásica canción de la década de los ochenta.
- Galería de posters por este enlace.
- LO MEJOR: Mejora con creces al título precedente sabiendo recrear de una manera coherente los infinitos usos y mundos de internet, aunque serían los muchos guiños de Disney hacia su propio imperio lo que hará esbozar más de una sonrisa cómplice (aparte del de las princesas, también visto en avances previos, destacaría los de Star Wars y Marvel)
- LO PEOR: Las referencias para los jugones vuelven a ser tan escuetas como en el título precedente, y el autobombo de Disney puede llegar a ser excesivo para algunos espectadores.