FICHA TÉCNICA
Título: Super 8
Título original: Super 8
Dirección: J. J. Abrams
País: Estados Unidos
Año: 2011
Fecha de estreno: 19/08/2011
Duración: 112 min.
Género: Ciencia ficción
Reparto: Elle Fanning, Kyle Chandler, Amanda Michalka, Ron Eldard, Noah Emmerich, Gabriel Basso, Katie Lowes, Joel Courtney, Zach Mills, Marco Sanchez
Distribuidora: Paramount Pictures
Productora: Paramount Pictures, Amblin Entertainment, Bad Robot
SINOPSIS
La acción tiene lugar en un pequeño pueblo de Ohio, en el verano de 1979. Un grupo de chicos juega con una cámara Super 8 y rueda escenas de una película experimental sobre zombis. De repente, en mitad del rodaje, se produce la colisión de dos trenes. Una auténtica tragedia que va seguida de misteriosas desapariciones y otros acontecimientos increíbles. Esto lleva a pensar a los chavales que el accidente fue premeditado y que unas extrañas y poderosas fuerzas de otro planeta están tomando el lugar. Pero, ¿por qué?
CRÍTICA
Muchos de los de mi generación (tengo 36 años) crecimos con películas como Los Goonies, ET, Regreso al futuro, El chip prodigioso, Gremlins, El secreto de la pirámide,… Todas ellas tienen en común ser de la década de los 80 y todas ellas tienen en común un nombre: Steven Spielberg. Y es que con esta Super 8 queda claro desde el primer momento que lo que ha intentado J.J.Abrams es realizar una película con el estilo y las formas de aquella época (y de ese director) Lo que pasa es que aquel estilo de cine quedó en el pasado (e incluso diría que superado, para bien o para mal) con lo cual el resultado final de este ejercicio de nostalgia se salva pero dista mucho de ser la película del verano vitoreada por muchos.
Lo que si hay que alabar es el aparato promocional del film, que intentó guardar el máximo misterio sobre la supuesta “cosa” del mismo, en una jugada parecida a la que llevó a cabo su director (J.J.Abrams) con un trabajo anterior suyo como productor: Cloverfield (me niego a titularla Monstruoso como se hizo aqui en España) Pero lo que allí podía parecer un poco original (porque la historia de monstruo arrasando una ciudad ya lleva décadas de ejemplos varios, como la conocidísima Godzilla, si bien en los últimos años no se ha abusado mucho del tema) en esta resulta (pese a lo que pueda parecer) totalmente secundario, metido con calzador y finiquitado de manera boba y sentimentaloide.
Tampoco pretendo cargarme la película, porque ese “espíritu” (por llamarlo de alguna manera) del cine de hace tres décadas está presente en un inicio prometedor, en el que puedes disfrutar además de unos actores jóvenes que no resultan tan repelentes como uno podría temer (atención a la espléndida Elle Fanning, hermana de Dakota). Y es en ellos en donde se centrará más el argumento, dejando en un segundo plano -SPOILER- lo del gigantesco alien -FIN SPOILER-, confirmando las aseveraciones del director de que títulos como ET o Tiburón, de su maestro Spielberg al que él homenajea aqui, eran algo más que los bichos protagonistas. Lo que pasa es que las historias de los personajes son tópicas y típicas (por ejemplo los amorios de los chavales protagonistas remiten UNA VEZ MÁS al clásico de Romeo y Julieta por el problema entre ambas familias, totalmente colateral y que encima se ¿supera? porque si), estando carente el resultado final de ese cinismo con el que hemos ido madurando en estos últimos años.
Vamos, que nos puede recordar a cuando eramos niños pero YA NO LO SOMOS. Y es que lo que en los 80 triunfó en títulos como Gremlins es ahora dificil de rescatar, ya que a ojos del espectador de tres décadas más tarde, ciertos elementos se antojan simples, infantiles y ñoños. Como mínimo no ofenden a la inteligencia como muchos ejemplos del mal llamado cine infantil que se han estrenado en los últimos tiempos, pero aún así vistos en Super 8 se convierten más en un ejercicio de nostalgia que en una recuparación de los mismos. Por su parte el apartado de ciencia-ficción se antoja previsible, no tan sólo con la antes citada Cloverfield sino incluso con The host, títulos de los que es muy deudor este Super 8, abonado además a un climax final que pretende ser entrañable (o eso aparenta) pero que a mi se me hizo simplista (tras todo lo previo, ¿se va… y ya está, todos tan contentos?), a lo que no ayuda -SPOILER- una criatura que parece prima-hermana de los títulos antes citados y sin la empatía que tuvieron en su época clásicos como ET -FIN SPOILER-.
Pero bueno, ahi entrariamos en otro debate, y es que los efectos especiales de antes, al ser más “físicos” aparentaban ser más reales que el exceso de CGI que hay en la actualidad (por eso cuando la película intenta ser más espectacular se hace menos creíble, caso del accidente del tren (que supera al visto en El fugitivo, y mira que aquel era increible) o lo que sucede en el climax final) Asimismo -SPOILER- lo del alien no es nunca explicado sino más bien sugerido, y la nave que se monta al final, ¿porque no la hizo antes? Además, ¿secuestra humanos para comérselos y cuando se puede zampar a los niños no lo hace? Resulta incongruente, y eso por no hablar de un ejército que tarda mucho en dar con semejante bicharraco con lo grande que es, por mucho que vaya como los topos -FIN SPOILER-
En resumidas cuentas, Super 8 es un entretenido ejercicio de nostalgia para los que crecimos con el cine de los 80, pero al igual que este, el resultado y la sensación que nos deja es que cualquier tiempo pasado no sé si será mejor o peor pero como mínimo si que ha sido superado y ya es eso: pasado. Ya no somos niños y hay cosas que resultan demasiado simplonas en este film que, pese a todo, también tiene sus aciertos (atención a la divertida sorpresa durante los títulos de crédito)
LO MEJOR: El ejercicio de nostalgia hacia los años 80 y su cine que es todo el film en su conjunto.
LO PEOR: Ya no somos los niños de entonces, por lo que muchos detalles se hacen previsibles y simplones (cuando no pastelosos)
Estoy de acuerdo en casi todo con la salvedad de que los que tenían nuestras edades cuando salieron et, los goones, etc. es posible que pensasen de ellas lo mismo que tú ahora, que está bien pero es algo ñoña e infantil. Y los que tienen ahora esas edades tiernas son diferentes a nosotros cuando teníamos esa edad.
Y vaya pedazo de poster de Drew Struzan. Vaya crack, que Dios lo conserve muchos años.
A los niños (o algunos, tampoco a todos) les puede gustar Super 8 pero su público potencial creo que son los actuales treintañeros.
Entonces han fallado jeje. Provoca nostalgia, pero no se la recomendaría a mis amigos.