En la década de los setenta fue cuando empezó a tener más relevancia la figura del justiciero urbano, siendo uno de sus ejemplos más notorios el personaje de Punisher (el Castigador) de los comics Marvel, el cual ha gozado de tres películas y una serie. También en aquella década fue cuando este estilo de personaje quedó marcado para bastantes con los rasgos de Charles Bronson, justiciero emblemático que además de en la original (que es la que genera el presente remake) tuvo hasta cuatro secuelas. He de admitir que tengo un vago recuerdo de algunas de las mismas, cuando las disfruté siendo pequeño en sus pases televisivos, pero como el recurso del justiciero urbano siempre ha tenido su público, lo que Bronson se puede decir que “comenzó” lo han seguido a través de las décadas múltiples ejemplos más, siendo uno de los más recientes el Bryan Mills encarnado por Liam Neeson en la trilogia de Venganza (y luego aprovechado por el citado actor en otros títulos con premisas más o menos similares)