Querido esposo:
Te escribo esta carta para decirte que he decidido dejarte, por el bien de los dos. He sido una buena mujer para ti estos siete años, y sin embargo no puedo decir nada bueno que me haya tocado a mi.
Estas dos últimas semanas han sido un infierno:
Hoy, tu jefe me llamó para decirme que habías renunciado al trabajo y eso fue lo último que pude soportar.
La semana pasada, viniste a casa y no mencionaste nada acerca de mi corte de pelo, ni del arreglo de mis uñas; cociné tu comida favorita y hasta estrené un nuevo camisón, pero tu, llegaste a casa, comiste en dos minutos y te fuiste directo a la cama después de ver el partido de fútbol.
Ya nunca me dices que me amas y ni tan siquiera me acaricias.
O me estás engañando con otra o ya no me quieres.
De cualquier manera, me quiero ir y te abandono.
P.D. No trates de buscarme. Tu hermano y yo nos mudamos a Baracaldo juntos.
Que te vaya bien
Tu Ex-esposa.