En una cartelera con tantos y tantos estrenos reconozco que hace tres años dejé pasar la primera entrega de esta (me imagino) saga, porque me parecía otra vuelta de tuerca sobre el género de la desmitificación paródica de monstruos que ya tuvo su momento de éxito y gloria con Los Monsters, un clásico de televisión del que disfruté en mi infancia cuando fue repuesto en aquel otro programa mítico como fue La bola de cristal. También es verdad que el hecho de que estuviera implicado el nefasto Adam Sandler influyó en tal decisión, si bien eso se pierde en la versión doblada (en la original le da voz a Drácula mientras que aqui en España eso corre a cargo de Santiago Segura)