Esperando que algún día se pueda realizar un Hellboy 3 que complete la trilogia del famoso personaje de comic (creación de Mike Mignola), el director Guillermo del Toro cambia los gargantuescos robots de Pacific Rim por un relato de terror más clásico con claras referencias a Poe y Lovecraft y que puede recordar a los títulos más emblemáticos de dicho género de la productora Hammer.
Tengo que reconocer que las películas de Guillermo del Toro funcionan de manera correcta y entretenida en líneas generales, incluyendo ahi su labor como novelista con esa The Strain que ha acabado como serie de televisión (de la que no he pasado más allá de su primera temporada por lo dilatadísimo de su base literaria); con la salvedad de El laberinto del Fauno, sin duda la obra maestra de su filmografía.