Genghis Khan (1162-1227) fue el gran unificador de las tribus nómadas de Mongolia y creador uno de los imperios más grandes que jamás han existido: el imperio mongol.
Tras la muerte de su padre, el joven Temüjin es despojado de su rango de heredero y de todos sus privilegios. Temüjin deberá él solo recuperar aquello que le pertenece por nacimiento. Debemos tener en cuenta que esta película nos sitúa en un lugar y una época bastante remotos. Las costumbres mongolas de hace 800 años nos pueden parecer a día de hoy brutales y/o machistas … pero eran así.
También hay que tener en cuenta que muy probablemente la historia de Gengis Khan fuera agrandada y exagerada durante su reinado y en épocas posteriores. Aún así las batallas y gestas están narradas de forma bastante real, no hay cientos de guerreros volando por los aires. Pero es imposible explicar la historia de un personaje así sin rozar lo increíble. Es tarea de cada espectador decidir qué fue real y qué fue agrandado por la leyenda.
Cuando Temüjin es niño y debe huir continuamente para sobrevivir, la película se ve con mucho interés. La lucha contra los enemigos y las continuas adversidades de su existencia, convierten al joven Gengis Khan en un personaje heroico, casi mitológico, ya desde niño.
Cuando el tiempo va pasando la historia se hace algo menos apasionante y más confusa. La accidentada historia de amor está bien llevada. La pareja de enamorados no tiene una química especial entre ellos, pero en aquella época los matrimonios eran otra cosa. La determinación de Temujin acabará por arrastrar a toda su familia por los caminos de la penuria.
La dirección de Sergei Bodrov es más que aceptable, sobretodo contando con la escasez de medios del cine ruso. Explica la historia de forma correcta a pesar de ciertos personajes que quedan desdibujados. Supongo que es más un fallo de montaje que de dirección. Han tenido que recortar escenas ya que el film se va a más de 2 horas y el peligro del aburrimiento planea sobre él al final. Final totalmente abierto a nuevas entregas ya que apenas nos cuenta el inicio de su reinado. Aún faltan muchas gestas y conquistas por contar.
Técnicamente la película está muy lograda, la fotografía es preciosa. Los campos y praderas mongolas están filmados de forma preciosa creando momentos de gran belleza.
Además el hecho de contar con actores nativos le da mucha verosimilitud. La forma de desenvolverse en el medio (caballos, espadas, ropas) no es aprendida, se ve casi innata y hace ganar enteros al film.
6,5
Como anécdota, explicar que ya hubo una versión sobre la vida de Gengis Khan de 1956 interpretada por John Wayne y Susan Hayward: El conquistador de Mongolia (The conqueror). La película, producida por Howard Hughes, era bastante floja:Wayne lo clavaba como vaquero pero como mongol dejaba mucho que desear. La peli fue un sonoro fracaso comercial y de crítica.
Hoy es recordada por haberse rodado en una zona del desierto de Utah en la que se habían realizado pruebas nucleares años antes. La radiactividad de la arena produjo consecuencias trágicas en forma de cáncer para muchos miembros del rodaje, incluidos los protagonistas. En 1984 habían contraído cáncer 91 de los 220 miembros del rodaje.